El método Pilates consiste en una serie de ejercicios destinados a buscar la correcta alineación del cuerpo, pidiendo a la persona que sea consciente de su postura, para poder corregirla mediante ejercicios de control motor, fuerza y flexibilidad. Además, proporcionan una mejora de la concentración, puesto que cada movimiento se debe coordinar con la respiración.
Los beneficios que nos ofrece la práctica de Pilates vienen determinados por los 5 principios generales:
- Respiración y contracción del suelo pélvico.
- Pelvis en retroversión, evitando hiperlordosis de la zona lumbar.
- Correcta posición de las escápulas, evitando compensaciones de cuello, cabeza y hombros.
- Tórax alineado con la pelvis.
- La posición de la cabeza y de la columna cervical debe estar centrada entre hombros y estirada con la sensación de autocrecimiento.
Estos ejercicios se pueden realizar tanto en suelo como en máquina (Reformer), siendo ideal la combinación de ambos para aportar un mayor beneficio a nuestro cuerpo. En un primer momento, las clases con reformer pueden ser de gran ayuda para asistir en la correcta realización de los movimientos y aprender los conceptos más importantes del Pilates. Una vez asentados estos conocimientos y adquirido un mejor estado de forma, resulta de gran interés combinar clases de Pilates Reformer con clases de Pilates Suelo, el cual cuenta con un gran repertorio de ejercicios y elementos, así como con el control total sobre nuestro cuerpo corporal contra las dificultades que nos presenta la gravedad en cuanto a equilibrio y coordinación. Una vez adquiridas estas destrezas, el Pilates Reformer puede pasar a ser un ejercicio de más intensidad, aportando diferentes resistencias a nuestros movimientos.
En cuanto a los beneficios que nos puede aportar el Pilates Reformer:
- Mejora de la flexibilidad y rango articular
- Aumento de la fuerza muscular
- Mejora de la postura global del cuerpo
- Mejora de equilibrio y coordinación
- Aumento del control motor y propiocepción de nuestras articulaciones